04/05/2021
A pesar de los riesgos conocidos, la conducción distraída no va a desaparecer
by Alex
De acuerdo con el Departamento de Transportación de los Estados Unidos, en 2016 los accidentes de tránsito que involucraron a un conductor distraído resultaron en la muerte de 3,450 personas. Ese número representa el 9 por ciento de las 37,410 muertes por accidentes de tránsito de ese año.
Aunque hay miles de personas muriendo cada año debido a un conductor distraído, casi el 80 por ciento de los conductores admiten hablar por teléfono mientras conducen. Más del 30 por ciento de los conductores admiten haber casi ocasionado un accidente mientras estaban distraídos. Y el 19 por ciento dijo que continuarán conduciendo distraídos aunque fuera ilegal.
Esta información proviene de una encuesta reciente realizada a 2,000 consumidores y ejecutivos para el Índice de Riesgo de Viajeros de 2019 de “Travelers Companies”. La encuesta examinó la frecuencia de conducción distraída y las actitudes para reducirlas.
En la encuesta se entrevistó a ejecutivos porque a menudo presionan a sus empleados para que estén disponibles incluso cuando no están en la oficina, lo que puede llevar a conducir distraído. Desafortunadamente, parece que muchos lugares de trabajo no consideran la conducción distraída cuando están creando las políticas sobre la disponibilidad de los empleados.
Las distracciones siguen llegando y empeorando.
El Índice de Riesgo de Viajeros encontró que los conductores encuestados participaron en algunas actividades detrás del volante que son increíblemente distrayentes:
- 44 por ciento de los conductores admitió escribir mensajes de texto o correos electrónicos;
- 23 por ciento admitió utilizar las redes sociales;
- 22 por ciento admitió tomar fotos o grabar videos;
- 15 por ciento admitió haber comprado en línea.
Justo cuando creíamos que lo habíamos visto todo, los conductores continúan participando en comportamientos que amenazan su vida. Varios de los encuestados dijeron que sería difícil o muy difícil detener sus comportamientos. De hecho, el 5 por ciento de los encuestados dijo que sería muy difícil dejar de comprar en línea mientras conducen.
Como se mencionó anteriormente, la presión de los ejecutivos para estar disponible en todo momento, ha aumentado la conducción distraída en sus empleados. De los ejecutivos encuestados, el 87 por ciento dijo que esperaba que sus empleados estuvieran disponibles, a veces o con frecuencia, cuando no están en la oficina.
Al menos el 20 por ciento de los consumidores encuestados admitió que la presión de sus jefes a estar disponible los ha llevado a conducir distraídamente. Casi la mitad dijo que siempre tenían que estar disponibles o que no querían perderse una emergencia laboral. Otro 17 por ciento admitió que al conducir completan mucho de su trabajo.
La encuesta encontró que alrededor del 75 por ciento de los lugares de trabajo tienen políticas de conducción distraída. De ellos, sin embargo, solo el 18 por ciento realmente aconseja a sus empleados a que pongan sus teléfonos en “no molestar” mientras conducen.
¿Qué podemos hacer para reducir la conducción distraída?
Según la encuesta, hablar puede hacer una gran diferencia. De los consumidores encuestados, el 16 por ciento dijo que casi nunca o nunca dicen algo cuando viajan con un conductor distraído. Sin embargo, el 54 por ciento dijo que probablemente dejarían de conducir distraídos si un pasajero se lo pidiera.
Otra investigación ha encontrado que los padres pueden ser efectivos para reducir la conducción distraída de sus adolescentes, teniendo conversaciones con ellos y creando expectativas claras. Aproximadamente dos tercios de los padres dicen haber tenido esa conversación con sus hijos.
Por último, podemos responsabilizar financieramente a los malos conductores por el daño que causaron a través de demandas por lesiones personales. Si usted o algún ser querido ha resultado lesionado por un conductor distraído, reúnase con un abogado experimentado para que evalúe su situación y le aconseje qué hacer en los próximos pasos.